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Reseña de una época - 1943 -

HISTORIA DEL FÚTBOL CANARIO

- Retrospectiva -

 

Domingo, 21 de marzo de 1943

 

Liga Interregional (1943)


STADIUM "PEPE GONÇALVEZ"

 

C. D. GRAN CANARIA  //  UNIÓN MARINA

 

Los "merengues" derrotan ampliamente a los "azulgranas"

Jerséis de primera categoría pero... juego de tercera

 

 

CEDRES, Gran Canaria6 - 1. Venimos soportando unos partidos de fútbol de los que requieren mucha voluntad para no abandonar el estadio antes del final. Un fútbol pobre, carente por completo de técnica y coraje. Mucho entusiasmo, sí; pero no es esto suficiente para jugar. De nada vale el entusiasmo, sino se posee técnica futbolística.

El Unión Marina nos gusta menos cada día. Ya no vemos ni tan siquiera una colocación regular. El Gran Canaria tampoco hizo un buen partido, pues con su contrincante del pasado domingo se pudo haber hecho maravillas; pero donde no hay, es inútil pedir. Paredes, Déniz y Guerra hicieron lo que quisieron, pero no lo que pudieron. Había quien creía - nosotros no - que la actuación de los blancos frente a los campeones había sido la iniciación de una superación del conjunto, pero es un gran error. Nuestro criterio es que el Gran Canaria sigue siendo el mismo conjunto que ha sido durante todo el tiempo transcurrido desde que comenzó el pasado campeonato. Claro está que es superior al Unión Marina, equipo éste que cada día está peor de lo que siempre ha estado.

Siete goles y trece córners. El encuentro fue malo de verdad; a veces nos daba la sensación de que presenciábamos un partido de ping-pong: tal era el peloteo, sin orden ni concierto, que tuvimos que aguantar durante noventa minutos. Solo en los diez primeros de comenzado el juego hubo un conato de interés, cuando el Unión logró trenzar algunas jugadas que pusieron en peligro la meta de Antonio, pero que la delantera azulgrana no supo aprovecharse en sus múltiples ocasiones. Antonio actuó muy bien en su meta. También Tino, pese a la goleada hizo lo suyo.

Y el Gran Canaria logró seis goles y Guerra los hacía a granel porque, cuando Guerra chutaba sin que nadie le molestara - si alguien le hubiera cuidado un poco estamos seguros que Guerra no consigue ni uno. Se embotellaba tanto al marcar, que el mismo se sorprendía cuando hacía correr el marcador.

Pero también el Unión Marina hizo girar el marcador por medio de su extremo derecho Chillón. Este gol, si el ojo arbitral observa un poco, habría descubierto en él algo de "estraperlo". Pero, bueno, para lo que le iba a servir.

El encuentro. Ya tenemos a los equipos en el terreno con unos precisos jerséis de primera categoría. El público, escaso. Hasta las "localidades gratuitas" del exterior del estadio están poco concurridas. Se preveía lo que iba a ocurrir.

Inicia el juego el Unión con una escapada sin consecuencia. Lo mismo hace el Gran Canaria, pero ambas defensas nos parecen muy seguras, aunque en el transcurso del encuentro comprendimos que nos habíamos equivocado. Sobre todo la del Unión, que luego estuvo, como todo el conjunto, desastrosa.

El Unión lleva el peligro a la meta de Antonio, situación que dura cerca de diez minutos, pero la delantera unionista no pita, encargándose el árbitro de hacerlo contra los azulgranas. Además, Antonio se está portando muy bien. Según decían algunos, esta tarde le tocaba el turno bueno. Para la tormenta y comienza el trabajo de Paredes, secundado por Déniz, lo que da ocasión a Tino para efectuar algunas buenas intervenciones. Un buen centro de Chillón es rematado por Rivas, pero el balón prefiere las alturas. Por los unionistas se destaca su extremo izquierdo y Lisa, pero no encuentran colaboradores. El dichoso balón iba siempre a parar a los pies de los blancos, salvo algunas veces que caía muy cerca de los unionistas y éste se hacía un lío.

En este primer tiempo se ejecutan los primeros córners sin consecuencias. La zaga unionista ha comenzado bien, pero les dura poco su acierto. Paredes está muy cuidado al principio y sus escapadas no encuentran quien las apoye. Hay un barullo en la puerta de Tino, que se encuentra batido, pero la defensa salva la situación. Paredes ejecuta un córner que Tino cede nuevamente, y otro y otro, hasta que uno es rematado de cabeza por Guerra, para hacer el primer gol a los diecinueve minutos.

Este tanto anima a los blancos que reaccionan bastante, ocasión para que Déniz avance, pero va alto. También Paredes envía fuera un magnífico tiro. Comienza el dominio de los blancos y también la superioridad, pero superioridad barata.

Llevamos veintidós minutos de juego cuando se forma un barullo en la meta unionista, que es aprovechado por Periquín para poner el marcador a 2-0. Otro córner contra el Unión que es rematado de cabeza y que Tino bloca. Guerra está haciendo cuanto quiere; cuando recibe el balón, nadie se lo disputa. Así hizo lo que hizo... Se nivela por un momento el dominio, pero Ceballos, que siempre está bien colocado, trabaja mucho y bien. También el meta azulgrana hace una arriesgada salida que evita el aumento del tanteo. Sigue los córners, sin que pase nada. Un magnífico tiro de Semín lo despeja Antonio de una buena estirada, cediéndolo a córner, pero el árbitro no lo pita. Este, en cambio, es muy pitado.

Viene el descanso y nosotros hacemos uso de él, pues el aburrimiento es mucho.

Corren los minutos con monotonía. Desde el comienzo de la segunda parte, el dominio es blanco; pero no por ello deja el Unión de tener entusiasmo. No se desmoralizan; atacan con algún peligro, pero nada más. Los merengues acosan la meta contraria, pero los balones van alto o por fuera. Comienzan los córners, pero no pasa nada. Guerra se encuentra solo con el balón ante Tino, pero se hace un lío al ver que puede meter un gol. La falta de costumbre... Se nivela algo el juego y Campos corre muy bien los balones, pero no ocurre nada, pues sus centros no encuentran rematadores.

Ahora miramos como están colocados los jugadores del Unión y nos da pena; hasta eso han perdido. Y así, todo el encuentro, sin colocación, ni juego de conjunto.

El juego es monótono. Solo Déniz, Naranjo, Paredes y alguno que otro nos regalan algunas jugadas que reclaman nuestra atención; pero en general, juego de tercera categoría. A los veinte minutos consigue el Unión su único gol en un pase de Campos que Chillón introduce en las redes. Este tanto ha inyectado algún entusiasmo a los azulgranas, y en algunos momentos nos parece que el empate es inminente; pero no puede ser: no hay equipo. A los veinticinco minutos se efectúa un saque de banda, llegando el balón, en barullo a los pies de Guerra, para marcar el tercer tanto. Y a los treinta, Déniz corre con el balón, burla a la defensa y hace el 4-1.

El juego, pese a los goles, que se efectúan sin jugadas vistosas, sigue siendo monótono. El Gran Canaria juega algo y el Unión nada, aunque sus escapadas frecuentes parecen que son peligrosas. Faltan cuatro minutos para oír el pitido final cuando un magnífico tiro de Paredes es despejado por Tino y rematado por Guerra para hacer el quinto gol. Transcurre un minuto escaso, cuando Periquín hace el último gol, de un pase de Popo.

Quince minutos antes de finalizar el juego, el público comenzó a desfilar.

Y termina el encuentro con 6-1 que no dice nada en lo que al fútbol se refiere peri si en la clasificación de los equipos.

El encuentro fue arbitrado por colegiado, señor Correa, el cual nos pareció que quiso hacerlo bien.

Alineaciones:

Gran Canaria: Antonio; García, Naranjo; Jerónimo, Ceballos, Cedrés; Pedro, Herrera, Guerra, Déniz y Paredes.

Unión Marina: Tino; Rodríguez, Guatiza; Semín, Lisa, Domínguez; Antonio, Aristeu, Graciano, Rivas y Campos.