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Reseña de una época - 1942 -

HISTORIA DEL FÚTBOL CANARIO

- Retrospectiva -

Domingo 14 de Junio 1942

 

FUTBOL: Quien es quien...


LIGA INTERREGIONAL (1942)


2  --  REAL HESPÉRIDES  //   MARINO F. C.  --  2


El Marino empata con el Real Hespérides, en La Laguna.

El once "marinista" fue muy superior desde el comienzo hasta el final. Una pifia de su guardameta, en los minutos finales, originó el tanto de la igualada para los "hesperidistas"

 

Jugada con balonSe decide el primer puesto. Quizás muy pocos habían visto la posibilidad de que en este encuentro se decidiera el primer puesto en la Liga. Y así ha sido. El empate registrado en el partido Hespérides - Marino decidió con carácter definitivo el primer puesto de honor. Ha quedado, pues, clasificado el Tenerife en primer lugar. Sus diecisiete puntos y su superior "goal" average sobre el equipo del Marino y Victoria le clasifican. Sin necesidad de obtener un punto más en sus intervenciones restantes.

El Hespérides y su campo. ¿Qué influirá para que el Real Hespérides no aproveche nunca la ventaja de jugar en su Campo? No lo sé. Lo indudable es que el equipo lagunero no ha hecho en toda la Liga ni un mediano partido en su terreno del Paseo de la Manzanilla. Lo demuestra claro el hecho de que solo tres puntos han sacado en su feudo. Y quizá inmerecidamente. Porque frente al Atlético - su única victoria - apenas mereció ganar. Y en el encuentro de hoy con el Marino, no debió ni siquiera cosechar el empate. En cambio, el equipo de La Laguna ha tenido fuera actuaciones buenas y se ha llevado ocho puntos. Donde es más difícil obtenerlos.

En este encuentro le hemos visto actuar de forma desquiciada. Ni siquiera sus extremos, los más vivos del ataque, dieron sensación de peligro actuando todos por bajo de lo que les hemos visto hacer en el campo lagunero. Solo Isidoro, él ágil meta tuvo intervenciones decisivas y magníficas de aciertos. Una de ellas arrojándose a los pies de un delantero y arrebatándole una pelota que parecía destinada a la red. Dos salidas valientes y espectaculares salvaron otras dos jugadas en el que el gol se dibujaba. Los más que bullían de su cuadro eran Gómez en la defensa. García, en la media y Viera, de eje delantero. En suma, conjunto pobre, sin medios alas y sin  interiores. Faltando estas piezas poco puede hacerse en el fútbol.

Gustó el Marino.  El Marino - nos han dicho - es de los equipos que más ha jugado en Tenerife. Aún en la tarde catastrófica frente al Deportivo Tenerife el conjunto azul no desentonó en su forma y en su fondo. En este encuentro frente al Real Hespérides, el once marinista fue superior desde el comienzo hasta el final. Mandó casi siempre sobre el terreno y llevó la iniciativa en el marcador. En los últimos minutos perdió su ventaja en una pifia de su guardameta. Pero el Marino destacó siempre por su mejor juego. Pasaban muy bien  la pelota, la controlaban mejor que sus adversarios, en el difícil terreno lagunero y eran sobre todos, peligrosos y decididos en las proximidades del gol. Un poco más de suerte ante el marco y se hubiesen llevado el triunfo por algunos tantos de ventaja. Aun contando con el regalo del último gol. Digamos en defensa de Salto que posiblemente el sol no le dejó ver la pelota que inocentemente llegó a la red.

Con ligeras excepciones, los jugadores azules rindieron un buen encuentro. Con bastante entusiasmo y rapidez hasta el área enemiga. Aquí tardaron en tirar y frustraron ocasiones bien proporcionadas. En dos de ellas, era más difícil malograr el tanto que hacerlo. Verdad es también que Viera, el ariete del Hespérides y Andrés, exterior izquierdo, malograron igualmente situaciones claras.

En resumen, hizo el Marino un buen encuentro en La Laguna y su penúltimo gran esfuerzo por no quedar atrás en una competición en la que ha mantenido su tónica de equipo de valor. Y mostró que su situación en la tabla es justa.

Un extremo circunstancial fue el mejor.  Se presentó el Marino con la baja de su extremo derecho Alfonso por indisposición. Y hubo el acierto de sustituirlo por Saura, el extremo circunstancial del encuentro que fue el mejor hombre del ataque. Durante la primera parte y en el primer cuarto de hora inicial del segundo tiempo, Saura fue el delantero que más peligro creó para la meta de Isidro. Centró mucho y bien y buscó constantemente el gol. Con Jerez, Memé, Cazorla y Minguine formó la mejor línea del Marino. Porque los cinco actuaron bien, destacando Minguine, con sus rápidas internadas, en la fase final de partido. En un tono más bajo la labor de los medios y defensas. Pero todos se batieron con entusiasmo. Salto fue el hombre más flojo del equipo. Tuvo el terrible fallo del último tanto. Antes había realizado una salida muy buena lanzándose a los pies de Andrés para evitar un tanto.

El encuentro en el marcador.  A los cinco minutos el primer tanto de la tarde. Se obtuvo en una jugada de Saura que originó una peligrosa situación dentro del área al entrar al remate Jerez y Memé. Pero el balón, alejado en un débil despeje fue a los pies de Cazorla que cruzó un gran tiro. A los veinte minutos empataba Mesa de un tiro raso.

La lucha se mantuvo en un tono mediocre hasta el final del primer  tiempo, sin que el marcador funcionara más. En la segunda parte el Marino, que juega en contra del desnivel del campo y del viento - que esta vez no se desató con violencia - obtuvo el segundo tanto a los veinte minutos. Un buen gol de su codicioso y tenaz extremo izquierdo.

Antes había malogrado Jerez un balón que recogió casi pegado a la línea de meta sacándolo sobre el larguero. Después fue Memé quien perdió el tanto en una gran jugada de Minguine entregándole el balón cuando se encontraba solo ante Isidoro, para que este le arrebatara la pelota por precipitación. En la puerta del Marino se registran también unos momentos graves. Una vez Andrés, en fuera de juego, y otra Viera, solos ante Salto, perdieron el gol. Y a los treinta y cinco minutos García que paso de centro delantero, tiro desde lejos un balón bombeado sobre el marco que Salto rechazó flojamente con las manos introduciéndolo en la red. Es el empate. El Hespérides, jaleado por el público, presiona ahora. Y en el último minuto Viera, metido dentro de los defensas, recibe un balón de Mesa y avanza solo sobre el marco azul. El gol parece inevitable, pero lo malogra al tratar de colocar demasiado la pelota que sale fuera.

REAL HESPÉRIDES: Isidoro; Conrado, Gómez; Ricardo, García, Tejera; Piña, Mesa, Viera, Braulio y Andrés.

MARINO F. C.: Salto; Pérez, Méndez; Farías, Campos, Bartolo; Saura, Jerez, Memé, Cazorla y Minguine.

Goles: 0-1 Cazorla; 1-1 Mesa; 1-2 Minguine; 2-2 García.